Febrero_2009

Cada noche, pienso que mañana puede ser ese día en el que cambiará mi suerte.
¿Y vivir de la pintura? Que gran suerte la mía vivir de tan noble propósito.
Que tormentosa la noche hasta entonces.
El viento baila con los árboles y les canta tan fuerte que no se oye el mar,
ellos contentos lucen con galantería sus ropas que vuelan sonrientes, pues que cosquilleo produce este viento de Febrero, que les hace sentir tan bien.
Se acerca la primavera, y empiezan a brotar tantas formas de vida, que contagian mi ser de sentimientos de expansión, e impulsan mi ser a trabajar hasta la obsesión.
Queridas formas ocultas en la noche, escondidas para no ser vistas, inspiración en mis adentros, locura de mi mente, nostalgia de mi alma.
Siento llenarse de sentimientos mi cuerpo rebosando hasta el escalofrío.
Suave cantar de la noche, siguen bailando las formas, sigue creando el artista.
¿Y mi árbol?¿No tiene traje para bailar con el viento?
No llores, tranquilo. No agaches la cabeza, pronto soplarán otros vientos y sentirás cubrirse tu desnudez con las más bellas ropas,
y sentirás las caricias,
y alzarás la mirada con toda la fuerza del inicio.


Oh Vincent, si estuvieses aquí,,
de cuantas cosas me hablarías,... ¿eres el viento?